Una nueva
investigación sugiere que la divagación y el habla no específica podrían
ser signos tempranos de la enfermedad de Alzheimer o demencia.
Los científicos encontraron evidencia de que las personas
con deterioro cognitivo leve (MCI), tienen más probabilidades de usar más palabras
de las que necesitan y tardan más en encontrar la palabra correcta que sus
pares sanos. MCI no siempre conduce a la demencia o el Alzheimer, pero la
investigación sugiere que las personas con esta condición tienen un riesgo tres
a cinco veces mayor de desarrollar demencia que otros de su edad.
La investigadora principal Janet Cohen Sherman, del Hospital
General de Massachusetts, hizo hincapié en que no todo el que divaga está en
riesgo de desarrollar una demencia, sino que se observa un cambio en los patrones
del habla. De hecho, espera que su equipo tenga una prueba diagnóstica
lingüística disponible para la próxima década, lo que podría identificar a
aquellos en riesgo de desarrollar demencia basados en sus patrones de
lenguaje, años antes de que surjan otros síntomas.
Los investigadores habían notado previamente estos cambios
en el lenguaje en las obras de figuras populares que pasaron a desarrollar
demencia o Alzheimer, incluyendo cambios en el estilo de escritura de Iris
Murdoch en sus libros posteriores y los discursos de Ronald Reagan. Para
comprobar si esta tendencia se reflejaba en la población general, los
investigadores compararon las habilidades lingüísticas de 22 individuos jóvenes
sanos, 24 personas mayores sanas y 22 personas con MCI.
Las personas con MCI "fueron mucho menos concisos en la
transmisión de información, las frases que produjeron fueron mucho más largas,
tuvieron dificultades para mantenerse en el punto y se podría decir que eran
mucho más redundantes", explica Sherman a The
Guardian. El vocabulario y la gramática complejos no eran un problema para
las personas con MCI, pero luchaban cuando tenían que repetir frases que
incluían pronombres ambiguos".
El equipo presentó sus hallazgos en la reunión de AAAS la
semana pasada antes de publicarlos en una revista de revisión por pares, así
que todavía debemos esperar resultados oficiales.
FUENTE: Science
Alert