Continuando con los esfuerzos por combatir la pseudociencia, el Dr. Rodolfo Salas-Gismondi, investigador del Departamento de Paleontología de Vertebrados, Museo de Historia Natural, UNMSM, Lima – Perú, e investigador asociado de la Division of Paleontology, American Museum of Natural History, NY – USA, refuta lo mostrado por los "especialistas" que analizaron la momia encontrada en Nazca hace unas semanas.
Resumen. El periodista Jaime Maussan ha defendido
la autenticidad “no humana” de diversos restos de momias procedentes de Nazca
en base a lo determinado por su equipo de científicos internacionales, luego de
la inspección directa de los especímenes y análisis de radiografías. Respecto a la mano que analizo en este
artículo, el Sr. Maussan refirió (programa “Contacto”; 2 de julio) que sus
científicos han coincidido en afirmar que cada dedo posee seis falanges y que
las manos son anatómicamente correctas y funcionales.
En base a la radiografía de esta mano y usando anatomía comparada básica,
identifico los huesos que la conforman y demuestro que (1) la mano está formada
por al menos dos individuos humanos y (2) que cada dedo tiene dos metacarpos (humanos),
una absoluta aberración anatómica y evolutiva. Esta no es una opinión, es el
resultado del análisis anatómico-comparativo. Este descarado montaje es la
evidencia científica que el equipo de Maussan defiende como auténtico. El análisis anatómico demuestra que los
científicos del Sr. Maussan, incluido el forense mexicano José de Jesús Salce y
el médico cirujano peruano Edson Salazar, no son capaces de distinguir entre un
metacarpo y una falange, o no quieren hacerlo.
Cuando uno escucha los comentarios del Sr. Maussan, del destacado forense
mexicano José de Jesús Salce y del médico cirujano peruano Edson Salazar, sobre
la autenticidad de los restos de Nazca, estos resultan bastante convincentes. Esta
capacidad de persuasión no solo radica en el apasionamiento que transmiten,
sino también en que todas y cada una de sus argumentaciones se encuentran supuestamente
respaldadas por el conocimiento y la pericia que les confieren sus profesiones
y por, a decir del Sr. Maussan, todo un equipo de reputados científicos internacionales.
En este artículo analizo la mano que el equipo de eminentes científicos
reunido por Maussan determinó como auténtica y anatómicamente funcional. El
resultado no habla bien de los conocimientos anatómicos de este equipo.

Identificación de los huesos
que conforman la mano proporcionada por el francés Thiery Jamin.
Como referencia, la Figura 1 muestra una imagen radiográfica de un brazo
humano con los huesos nominados.

Según el Sr. Maussan, la mano “alienígena” fue proporcionada por el francés
Thierry Jamin (Figura 2). Para la identificación y análisis de la mano he
utilizado la imagen radiográfica mostrada por el Sr. Maussan en el programa “Contacto” del 2
de julio del presente. La imagen muestra una mano con tres dedos. De
acuerdo con los eruditos del Sr. Maussan, cada dedo está formado por seis
falanges y los metacarpos (que conformarían la palma de la mano) son largos,
delgados y forman una palma rectangular. Este análisis es absolutamente
superficial, incorrecto, y está basado en la posición relativa de los huesos y
no en la morfología de cada hueso.
En una mano humana, como en la de otros vertebrados (por ejemplo, mamíferos,
reptiles y aves), cada dedo posee solo un metacarpo y generalmente varias
falanges (Figura 1). El número de falanges es variable entre especies, pero
nunca hay más de un metacarpo por dedo. Los metacarpos son huesos con facetas
de articulación complejas y muy diferentes a la morfología simple de las
falanges, es decir, no es posible confundir metacarpos con falanges cuando se
cuentan con imágenes relativamente claras. En
la radiografía de la mano “alienígena” de Jamin, el análisis morfológico de los
huesos indica que cada dedo está formado por dos metacarpos y cuatro falanges y
no por seis falanges como indicaron el forense mexicano y los demás científicos
de Maussan. Todos estos huesos son
de humanos adultos. En las figuras, los verdaderos metacarpos están
indicados con “MC” y las falanges con “F”. En
cambio, los “metacarpos largos y delgados que forman una palma rectangular” (según
fueron identificados por los científicos del Sr. Maussan) son en realidad huesos
diversos: dos metacarpos humanos dispuestos simétricamente (pero en sentido
inverso), dos posibles falanges y varios huesos largos. Lo curioso es que
estos huesos largos no tienen facetas articulares definidas y poseen las
epífisis desoldadas (por ejemplo, tibia de Figura 2), por lo que probablemente
sean huesos de individuos inmaduros, por ejemplo, niños muy pequeños (neonato).
El reducido tamaño de estos huesos y su morfología también indicarían que se
trata de los huesos del brazo y/o la pierna de neonatos.

Al comparar la mano de
Thierry Jamin con la de Paul Ronceros (Figura 3) se observa un patrón similar. Es decir, cada dedo está formado por al
menos dos metacarpos humanos. La “palma” de la mano incluye varios huesos largos.
En este caso es más evidente que uno de los huesos de la palma es un radio o un
cúbito de niño. Además, en esta mano
algunos metacarpos están mezclados entre las falanges, sin ningún sentido
anatómico. Incluso, uno de los dedos tiene una falange al revés, es decir
orientada en el sentido anatómicamente incorrecto.
En síntesis, la mano
considerada auténtica por el equipo de científicos de Maussan posee dos filas
de metacarpos humanos. Los huesos de la supuesta “palma” rectangular, son
probablemente huesos de brazos y piernas de individuos humanos neonatos. La mano
presentada por Paul Ronceros también posee más de una fila de metacarpos
humanos y además metacarpos mezclados entre las falanges e incluso una falange
al revés. Ninguna de las manos tiene sentido anatómico, funcional o evolutivo y
claramente han sido armadas a partir de más de un individuo humano. Al parecer,
ambas manos incluyen huesos del brazo y la pierna de individuos neonatos en la
zona de la “palma” de la mano, por lo que presumo que el mismo autor construyó
ambas manos mezclando en cada caso huesos largos (cúbito, radio, tibia, peroné)
de individuos neonatos con metacarpos y falanges de adultos.
Según Jaime Maussan la mano presentada por Thierry Jamin ha sido datada
(con Carbono 14) en 1200 años de antigüedad en la Universidad Autónoma de
México. Estos resultados son indicadores del carácter arqueológico de los
restos utilizados para la construcción de esta mano. Las modificaciones de las
manos de la momia “María” descritas
en el post anterior también fueron hechas sobre material arqueológico, lo
que demuestra una destrucción sistemática de restos patrimoniales en la zona de
Nazca. Esta nociva actividad se puede incrementar si se sigue presentando irresponsablemente
evidencia falsa como la analizada en este artículo. Este tema puede tornarse
aún más delicado si alguno de los huesos humanos pertenece a esqueletos no
arqueológicos.
Los destacados científicos
del Sr. Maussan, entre ellos el médico cirujano peruano Edson Salazar y el
forense mexicano José de Jesús Salce, no han podido distinguir falanges de
metacarpos. Sus convincentes declaraciones sobre la autenticidad de estos
restos no están basadas en el conocimiento científico y dejan un sabor amargo
sobre las verdaderas razones que subyacen a esta descarada farsa.
En
relación a la momia de Maussan, denominada “María” quisiera agregar que la
evidencia "no humana" es tan pobre que no se necesitan tomografías
axiales computarizadas, ni exámenes de ADN para determinar que es una momia
arqueológica humana. La anatomía comparada (no el photoshop) muestra que las
manos tienen la forma y proporciones de las manos humanas luego de las
alteraciones descritas. Los huesos del pie corresponden con huesos humanos. El
cráneo deformado, alargado se ha documentado en momias humanas de culturas
prehispánicas de la zona. El resto del esqueleto corresponde con el de un
humano. ¿Cuál sería el resultado de un análisis de ADN si la anatomía
corresponde con la de un humano? Si el fenotipo (la anatomía) es resultado del
genotipo (la información genética), el ADN sería más cercano al de un humano
que al de un chimpancé. ¿De qué evidencia extraterrestre estamos hablando?
A esta evidencia anatómica de fraude, debemos sumar que nadie conoce la
procedencia exacta de todos estos restos, que tampoco se conoce al descubridor,
que todos los restos permanecen ocultos, y que alteraciones sobre restos arqueológicos
han ocurrido anteriormente en la zona de Ica y Nazca. Además, el Sr. Maussan ha
defendido anteriormente evidencia "alienígena" que se ha probado
falsa y vive de esta actividad.
Declaración del autor. No estoy coludido con el gobierno, ni respondo
a intereses mayores. Simplemente, no puedo soportar que se monte una mentira de
esta magnitud a través de la manipulación de la evidencia científica.
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