Desde
la llegada del robot Curiosity a Marte se ha
retomado con mayor fuerza una de las antiguas pretensiones de los humanos:
conquistar otros mundos. El primer paso para llegar a esa meta es ir y establecernos
permanentemente en el planeta rojo. Sin embargo, dadas las características
inhóspitas de Marte, antes debemos ser capaces de sortear algunos problemas que
no existen en la Tierra.
Uno de estos problemas es la
radiación. Nuestro
gélido vecino tiene una atmósfera extremadamente fina (2% en comparación a
la Tierra), esto sumado a una ausencia de magnetósfera hace que la radiación
proveniente del Sol y otras estrellas golpeen directamente la superficie,
haciendo que cualquier posible colonia humana tenga que estar condenada a vivir
bajo el suelo para evitar la exposición.
Afortunadamente existen
instituciones y personas que ya están pensando en cómo hacer para que los futuros
astronautas no tengan que vivir como topos. Una de estas personas es peruana,
su nombre es Luciana Tenorio y conversó con Sophimania sobre su prototipo. Ella
estudió arquitectura en la Universidad Ricardo Palma (Lima) y la Universidad
Politécnica de Madrid (España), además de pertenecer a la Mars Society, la organización sin fines de
lucro que busca incentivar la exploración en Marte, y haber sido considerada
como una
de las innovadoras latinoamericanas menores de 35 años por la prestigiosa revista
de tecnología, MIT Review.
La arquitecta Tenorio, con la
ayuda de la Universidad Ricardo Palma, ha diseñado un hábitat y una
bio-cubierta a base de algas que tienen la capacidad de retener hasta en un
99.7% la radiación evitando así que se expongan las personas y las plantas en
el invernadero. “Compré una tela de algodón e hice varias pruebas hasta hacer
que esta sustancia de algas se quedará impregnada dentro del material”, explica
Tenorio sobre la bio-cubierta.
Si las plantas estuvieran
expuestas a la radiación de Marte, dependiendo de la especie, podrían morir
antes de llegar a ser útiles para el ser humano. Los humanos, por otro lado, podrían
desarrollar distintos tipos de cáncer. Todo esto es obviamente bajo una hipótesis
de trabajo porque ningún humano ha llegado allá hasta ahora. La protección desarrollada
por Tenorio busca evitar que esto ocurra.

Este prototipo se probó el año
pasado en la estación de simulación marciana en el desierto de Utah, EEUU,
cuando Luciana Tenorio y un grupo de peruanos fueron allá a hacer
experimentación como parte de la Mars Society
Capitulo Perú.
Sin embargo Tenorio quiere seguir
probándolas en el sur del Perú. “El segundo prototipo va a estar en Pampas de
la Joya, en el desierto de Arequipa, donde se va a experimentar un invernadero
que tendrá una cubierta de agua, porque el agua tiene hidrógeno y el hidrógeno
es el mejor escudo contra la radiación marciana” explica Luciana sobre la
futura estación que se construirá en el sur del Perú.
Utilizar agua traerá a su vez
otras mejoras al diseño de las estaciones. “Además permite crear paredes
traslúcidas hacia el exterior, cambiando un poco el paradigma de que las bases
marcianas tienen que ser completamente cerradas. No puedes tener ventanas,
tienen que ser subterráneas… genera un ambiente claustrofóbico al astronauta”,
añade esta arquitecta peruana de tan solo 27 años.
Ciertas características del
diseño del hábitat no solo podrían ser usadas en el planeta rojo, sino también
acá, en las zonas calurosas de la Tierra. “La estructura paramétrica del
prototipo, lo que hace es aumentar el área, y al aumentar el área de la
superficie se disipa un poco el calor”, cuenta Tenorio.
Estas características solamente
funcionarían en la Tierra, ya que en promedio la temperatura
de Marte es de -54 grados centígrados y no hay necesidad de disipar calor
en un planeta donde la máxima temperatura registrada es de 27 grados, en el
ecuador.
“Obviamente esto no se puede
aplicar a Marte porque allí hace mucho frío”, aclara. Pero todas estas
innovaciones siempre tienen un beneficio para la humanidad. “Finalmente lo que
se quiere es que todo lo que uno inventa tengan un doble uso, como los pañales,
lentes de contacto, la sartén de teflón. Todos estos son inventos que se
hicieron para el espacio pero que tienen un uso acá en la Tierra”, añade la
joven innovadora.
La iniciativa de Luciana Tenorio
no es la única que se está realizando en el Perú. La Sociedad Científica de
Astrobiología del Perú también está trabajando para construir una base de
investigación en el desierto de la Joya en Arequipa, y su presidente, el Dr.
Julio Valdivia es parte del proyecto conjunto del Centro Internacional de la
Papa - CIP y la NASA para
llevar la papa peruana a Marte.