Un nuevo informe dice que las emisiones agrícolas globales
deben ser recortadas para evitar el calentamiento del planeta a más de 2°C
durante el próximo siglo. El enfoque actual está en la reducción de las
emisiones procedentes del transporte y la energía, pero el equipo internacional
de científicos sostiene que si las emisiones relacionadas con la agricultura y
la granja no se abordan, los objetivos climáticos Paris serán imposibles de
lograr.
Se estima que un tercio de las emisiones de gases de efecto
invernadero provienen de la agricultura. El informe realizado por
investigadores de las universidades de Sheffield y Vermont y el Programa de Investigación
del CGIAR sobre el Cambio Climático analiza las emisiones de metano y óxido
nitroso, no de CO2. El informe se publicó en Global Change Biology.
El ganado produce metano como parte de su digestión y lo
emite principalmente a través de eructos. Además, la adición de fertilizantes
naturales o sintéticos a los suelos libera grandes cantidades de óxido nitroso.
Los investigadores han calculado por primera vez que estas emisiones deben
reducirse en 1 gigatonelada por año para el 2030. Los planes actuales solo
permitirían reducir las emisiones en un 21 – 40 %.
La co-autora del estudio, Lini Wollenberg de la Universidad
de Vermont, dijo que "esta investigación es una revisión de la realidad.
Los países quieren tomar una decisión sobre la agricultura, pero las opciones
que ofrecen actualmente no harán mella en la emisiones necesarias para cumplir
los objetivos mundiales que acordaron en París. Necesitamos un menú mucho más
grande de soluciones técnicas y políticas, con una inversión importante para llevarlas
a cabo".
Sin embargo, los autores advierten que los esfuerzos para
reducir los niveles de emisiones deben equilibrarse con la necesidad de
producir alimentos. "Tenemos que ayudar a los agricultores a alcanzar los
objetivos climáticos mundiales mientras, al mismo tiempo, alimentan al
mundo", dice el profesor Pete Smith de la Universidad de Aberdeen y
co-autor del trabajo.
"La reducción de las emisiones en la agricultura sin
comprometer la seguridad alimentaria es algo que sabemos cómo hacer. Es mucho
lo que se puede hacer con mejores prácticas de gestión en la agricultura. La
parte difícil es plantear cómo reducir las emisiones y al mismo tiempo ayudar a
los agricultores a cambiar sus prácticas en los próximos 10 a 20 años",
explica.
Por ejemplo, una medida a utilizar son los inhibidores de
metano que reducen las emisiones de vacas lecheras en un 30% sin afectar la
producción de leche. Además, se podría criar ciertas razas de ganado que
producen menos metano, y variedades de cultivos que liberen menos óxido
nitroso. Además, es importante asegurar el uso eficiente del agua para regar
los cultivos, mejorar el uso de los fertilizantes como el nitrógeno y el
estiércol de ganado y por una gestión más eficiente y sostenible. Sin embargo,
la mejora de los sistemas actuales requeriría una inversión masiva, el
intercambio de información y apoyo técnico para permitir una transición a
escala mundial, explican.
FUENE: BBC