Si eres un fan de Game of Thrones sabes que, a menudo, el
argumento gira en torno a los niños Stark, pero los matemáticos han utilizado
un algoritmo para calcular quién es el más importante de la saga.
Según los investigadores, el personaje que está más
conectado con el resto de personajes, y por lo tanto el más influyente, es el
pequeño pero poderoso león, Tyrion Lannister. Para poder determinarlo, usaron
el tercer libro de la saga: Tormenta de Espadas. Cada vez que identificaron dos
personajes que aparecían juntos dentro de las 15 primeras palabras se
catalogaba como vínculo, así se formaba una red.
Sin embargo, las conexiones por sí solas no cuentan toda una
historia y los investigadores no solo utilizaron esta medida, sino que usaron
google y su algoritmo (PageRank) para verificar qué tan importantes eran estas
asociaciones. Usando esta técnica, Tyrion volvió a ser el ganador.

En segundo lugar fue para Jon Snow, que, vivo o no, es el
único que está muy cerca a Tyrion usando el algoritmo de Google. El tercer personaje más influyente fue Sansa
Stark. Beveridge y Shan, líderes del estudio, piensan que Sansa es la verdadera
sorpresa en el estudio, ya que muchos espectadores piensan que es un personaje
débil. "Sin embargo, otros son conscientes de su valor como heredera Stark
y su uso en varias ocasiones como un peón en sus obras de poder", escriben
en su informe, denominado "Red de Tronos", publicada por la
Asociación Matemática de Estados Unidos, Math
Horizons.
El caso de Daenerys es muy interesante, porque ella no figura
tanto pero se vuelve cada vez más importante conforme avanza la historia, sin
embargo, debido a los pocos enlaces que tiene con otros personajes en la
historia, no tiene un ranking muy alto en este estudio.
Si bien es divertido para aplicar las matemáticas en nuestros
programas favoritos, también hay una gran cantidad de aplicaciones prácticas de
este tipo de investigación, por ejemplo, sería muy útil en agencias de
seguridad y la policía para ayudar a estudiar las redes terroristas.
Solo esperamos que nuestros personajes favoritos no terminen
muertos, como demuestra la tendencia de George R. R. Martin.
FUENTE: Science
Alert