Lucy es el ancestro humano fósil más conocido y más
ampliamente estudiado. Probablemente murió luego de una caída de un árbol,
según una reciente investigación publicada en Nature.
Los científicos que realizaron el estudio tomaron
tomografías computarizadas de los fósiles de 3,18 millones de años de edad y
evaluaron la causa de las fracturas de los huesos de Lucy. Una comparación de
los huesos rotos de Lucy con los de casos clínicos de chimpancés sugiere que
sufrió lesiones tras la caída de un árbol.
Crédito: UT Liberal Arts
Una serie de roturas limpias en la parte superior del brazo
derecho fueron el indicio más revelador. Lucy probablemente extendió los brazos
para amortiguar la caída del árbol, causando fracturas por compresión, según el
estudio. Sufrió otras fracturas en el hombro izquierdo, rodilla izquierda y la
pelvis izquierda, además de una costilla.
El autor del estudio, John Kappelman, un paleoantropólogo de
Universidad de Texas en Austin, explica que "la muerte es una de esas
cosas que nos permiten tender un puente entre nosotros y los demás. Analizar
las causas de su muerte fue un salto de empatía que me hizo más consciente de
ella como individuo".
Este estudio aviva un debate interminable acerca de qué
tanto Lucy y sus compañeros miembros de la especie Australopithecus afarensis,
un antepasado humano temprano, vivían en los árboles. Lucy podría haber vivido
en gran medida en el suelo, pero podría haber subido a los árboles durante las
noches para encontrar seguridad frente a los depredadores, Kappelman finaliza.
FUENTE: Time