Astrónomos japoneses han detectado una extraña formación en forma de
arco en la
atmósfera superior de Venus, y están tratando de explicar cómo está
haciendo para mantenerse en las duras condiciones del planeta.
Su mejor suposición es que la extraña estructura de 10 mil km es el
resultado de lo que podría ser la mayor onda de gravedad jamás vista en el
Sistema Solar, pero los científicos no creían que las ondas de gravedad
pudieran formarse en lo alto de la atmósfera. La investigación ha sido publicada
en Nature Geoscience.
La gigantesca ola que se extiende desde el Polo Norte al Polo Sur de
Venus, fue detectada por la
sonda japonesa Akatsuki en diciembre del año pasado. Durante cuatro días
seguidos, dominó la atmósfera increíblemente caliente y densa del planeta a
unos 65 km por encima de la superficie y permaneció misteriosamente inmóvil,
incluso frente a los vientos de 359 km/h de Venus. Pero luego desapareció tan
rápidamente como había aparecido.
A medida que la sonda espera pacientemente que la ola reaparezca, los
científicos están ahora encargados de explicar el fenómeno. El equipo detrás de
la sonda Akatsuki dice que toda la evidencia indica que se trata de una inmensa
onda de gravedad (no
confundir con las ondas gravitacionales) algo que ocurre cuando un material fluido,
tal como un líquido, gas o plasma, es sacudido fuera de una posición de
equilibrio.
Los científicos sugieren que, dada la intensa velocidad y forma de los
vientos de ácido sulfúrico de Venus, la única estructura que podría
soportar todo eso es una onda de gravedad. "El presente estudio muestra
evidencia directa de la existencia de ondas de gravedad estacionarias, y
muestra además que estas ondas de gravedad estacionarias pueden tener una
escala muy grande… tal vez la más grande jamás observada en el Sistema
Solar", informa
el equipo.
Esta onda de gravedad, son básicamente sólo una ondulación o
perturbación en la densidad de la atmósfera, se habría formado de la misma
manera como se forman las terrestres. Se cree que la onda de gravedad masiva de
Venus se formó debido a sus elevadas cadenas montañosas.
Como
explica Emma Grey Ellis para la revista Wired, si el viento se precipita
sobre una superficie desigual (como una cordillera irregular, o incluso un
turbulento océano) se crea una tensión entre las partículas de aire que desean
moverse hacia arriba y la gravedad que quieren empujarlas hacia abajo.
Este empujón por el equilibrio es lo que causa las ondas de gravedad en
la Tierra y el equipo de Akatsuki dice que no es coincidencia que este fenómeno
siga apareciendo sobre las tierras altas de Venus. Sugieren que los vientos
superficiales en Venus desencadenaron la formación de la inmensa onda de
gravedad cuando golpearon en la montaña de Aphrodite
Terra de 4.500 metros de altura que se asoma cerca del ecuador del planeta.
"Suponemos que las tierras altas son una clave para generar las
ondas estacionarias de gravedad, porque la mayoría de los arcos han aparecido al
centro y por encima de las tierras altas", dijo
a Ellis Makoto Taguchi, de la Universidad Rikkyo.
Mientras que los investigadores confían en su explicación, muchas
preguntas permanecen sin respuesta, como por ejemplo el misterio de cómo la
onda de la gravedad llegó tan arriba sobre la superficie.
FUENTES: EUROPA
PRESS, SCIENCEALERT