La
astrobiología es la ciencia que estudia la posible vida (pasada, presente o
futura) fuera de la Tierra y aunque aún no tenemos la certeza de su existencia,
cada vez más científicos están seguros que no estamos solos en el Universo.
Debido a este particular misterio, muchas organizaciones la usan como vehículo
de difusión científica, porque atrae justamente la curiosidad de los niños.
Entonces, teniendo como base
uno de los principios de la Hoja de Ruta de la Astrobiología de la NASA, la
cual hace un especial énfasis en la difusión de la ciencia a través de la
educación. La Asociación Peruana de Astrobiología
(ASPAST) está llevando a cabo talleres científicos en los colegios de las
zonas más alejadas de Lima.
“Estos talleres tienen como
fin llenar los vacíos que no puede cubrir el Estado en la enseñanza de ciencia,
particularmente de la astrobiología”, dice el Dr. Octavio Chon, presidente de
ASPAST sobre los talleres que ofrece su grupo.
La idea, que inicialmente se
probó en el colegio Institución Educativa Vitarte CNV del distrito de Ate
Vitarte en Lima, ha tenido tanto éxito que se
ha replicado en otros 10 colegios de distritos como el Callao, Puente
Piedra y Manchay.

Los talleres de 3 horas cada
uno, están divididos en dos segmentos: teóricos, donde los alumnos pueden
aprender sobre el origen de la vida con preguntas como ¿estamos solos en el
universo?, las ciencias espaciales, astronomía y ciencias básicas como química,
biología; y un segmento práctico, en el cual los niños realizan experimentos de
cromatografía (identificar la pigmentación en las plantas) criomagnetismo
(simular como sería la vida en condiciones frías), etc.
“La intención es que puedan
conectar sus ideas de forma que entiendan que la ciencia no es algo ajeno a sus
vidas, sino una actividad que forma parte de nuestra cultura y que se alimenta
de su curiosidad”, añade Chon, quien también es profesor de la Universidad de
Lima.
Para seguir con ese espíritu
de divulgación a todo nivel, ASPAST ha comenzado también los primeros talleres
en la ciudad de Ica y próximamente en la ciudad de Cusco, donde los dictará en
quechua. “Nuestros compañeros en Cusco están traduciendo al quechua, nuestros
manuales en castellano, y ni bien estén terminados comenzaremos con las
sesiones”, confiesa Chon.
Por último, la
asociación de astrobiología espera poder replicar estos talleres en todas
las ciudades del país, aprovechando el impacto que genera en los niños las
ciencias relacionadas con la investigación espacial.
