El glaciar Morteratsch, en los Alpes suizos, se está
encogiendo y perdiendo 115 pies de nieve por año. Debido a esto, un grupo de investigadores
suizos y holandeses van a rociar nieve artificial para evitar que el glaciar se
derrita.
La nieve fresca ayuda a reflejar la luz solar y aislar el
glaciar del calor. Para ver si la nieve artificial funciona igual de bien, el
glaciólogo Felix Keller de la Academia Engiadina en Suiza y su equipo están en
medio de un nuevo experimento. Han rociado nieve de 3 metros de profundidad
sobre el glaciar Diavolezzafirn de 1 300 pies cuadrados, a pocos kilómetros de
Morteratsch. Y para el final del mes, rociarán 1 metro más.
"Esperamos que con cuatro metros de nieve se cubra el glaciar
durante todo el verano", dice Keller. "Si tenemos éxito, estamos
seguros de que nuestra idea podría permitir proteger grandes glaciares de la
fusión"
Para que funcione a mayor escala, Keller y sus colegas no
necesitan cubrir todo el glaciar Morteratsch. Más bien,
sus modelos sugieren que cubriendo solo un kilómetro cuadrado donde el
derretimiento excede la producción de hielo se podría hacer una gran
diferencia. Sin embargo, cubrir 4 metros por un kilómetro cuadrado de nieve será
una gran empresa. Miles de máquinas de nieve tendrán que trabajar durante el
invierno y la primavera para bombear suficiente nieve para cubrir el glaciar cada
verano. Y necesitarán mucha agua para hacer la nieve, de 6 a 8 mil litros por
segundo.
Afortunadamente para este proyecto, otro glaciar cercano se
está encogiendo también, creando enormes lagos de agua derretida. Si el
proyecto Morteratsch recibe financiación, Keller y su equipo reciclarían el
agua de deshielo para hacer nieve artificial. Convertir toda esa agua helada en
nieve puede requerir un nuevo tipo de máquina. Keller prevé teleféricos
modificados para rociar la nieve desde arriba. Y estas máquinas de nieve podrían
potencialmente ser alimentadas con energía solar.
Si el proyecto piloto en Diavolezzafirn va bien y el equipo
recibe fondos, probablemente pasarán tres o más años desarrollando estas nuevas
máquinas de nieve. La nueva nieve podría, incluso, ayudar a regenerar el
glaciar, dice Keller. "Pero de lo que estamos seguros", dice,
"es que podemos reducir la retirada significativamente".
El turismo es una razón por la que la comunidad de
Morteratsch está interesada en salvar su glaciar, pero para Keller es mucho más
que eso. "Si solo fuera por el turismo, no deberíamos hacerlo", dice.
"Pero en cada región montañosa, lo más importante de los glaciares es que
proporcionan un suministro de agua cuando no hay lluvia". Los pobladores
de Ladakh, India, dependen del agua de deshielo de un glaciar del Himalaya
cuando las lluvias son escasas. Ahora que ese glaciar en particular se ha
derretido, la región se enfrenta a sequías y a cultivos fallidos. Hace unos
años, Keller ayudó a construir un glaciar artificial para ayudar a salvar parte
del agua de invierno de Ladakh durante el verano.
El método ciertamente tiene potencial para aliviar algunos
de los efectos del cambio climático, pero no es una solución. Es poco probable
que la nieve artificial detenga el derretimiento de los glaciares, porque la capa
de hielo es simplemente demasiado grande, dice Keller.
Y es una solución temporal a un problema que va a empeorar a
medida que la temperatura global continúe aumentando. A la larga, la única
manera de salvar nuestros glaciares es reducir nuestras emisiones de carbono.
FUENTE: POPSCI